Una creciente polémica se desató en Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, cuando se conoció el “reglamento” de la pileta de natación municipal inaugurada días atrás. Allí se detalla la vestimenta de baño con las que está permitido ingresar. Y la sorpresa llegó en el detalle de la ropa femenina: “Gorro, ojotas, malla enteriza (no blanca) y bikinis deportivas para damas” y luego agrega la de los caballeros: “Short de lycra, toallón y jabón”.
La malla “no blanca” provocó reacciones inmediatas. Aunque el director de Deportes del municipio Martín Gurisich dijo que “es posible que el reglamento este desactualizado” aclaró que “esa exigencia es por la transparencia” y para evitar “inconvenientes”.
La directora de Mujeres y Género de la provincia, Elva Willhuber, repudió esos dichos y dijo: “Desde que se oficializaron los colores de la diversidad, han dejado de separarnos”.
La polémica estalló cuando se publicaron las tarifas y horarios que regirán para la pileta semiolímpica inaugurada a fines de octubre. Junto a esa información, se indicaba la “prohibición” a las mujeres para que usen traje de baño blanco. La pileta fue construida por YPF y la municipalidad local en la zona sur de Comodoro Rivadavia, con una inversión de 200 millones de pesos.
No blanca. El reglamento para el ingreso a la pileta municipal de Comodoro Rivadavia.
Willhuber, quien integra el Consejo Federal ante el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad repudió la decisión. “Lo que nos une es el respeto y que no haya más control social sobre los cuerpos en base a la vestimenta. Y lo estoy diciendo desde una perspectiva de género. Pienso que es muy bueno que estas cosas se discutan. Es una interpelación a cuestiones discriminatorias que hemos pasado muchas mujeres e incluso el colectivo LGTQ+. Son cosas que tenemos que ir dejando de lado. No quiero y nadie quiere que los colores nos separen”, dijo la funcionaria en declaraciones a Radio Tiempo de Trelew.
También le contestó al director de Deportes Gurisich que justificó el requisito para “evitar la transparencia”. “Si es porque el color blanco genera transparencia sobre los cuerpos, lo que se tiene que trabajar es la aceptación y cómo deconstruir lo que es el cuerpo desde los mandatos patriarcales. Hay que revisar esa medida. No hay ninguna duda. Justamente son las diferencias las que se tienen que respetar. Que no nos separen, que nos una el respeto. La tolerancia hace que se ponga un velo a esas diferencias y eso no hay que propiciar. Que todo se discuta para que entre todas, todas y todes las discriminaciones sean cada vez menos”, agregó.
La polémica está abierta y aunque las autoridades prometieron revisar el reglamento, es muy difícil que, al menos en los inmediato, sea modificado.
Chubut. Corresponsal.
MG