El proyecto de Consenso Fiscal que impulsa el Gobierno abre las puertas para que en 2022 las provincias incrementen el gasto por encima de la suba de la inflación.
En 2017 y en busca de bajar el peso del déficit público se había acordado que el gasto de las provincias no podría crecer más allá de la escalada inflacionaria.
Pero en el texto que el presidente Alberto Fernández pretende sellar con los gobernadores el próximo lunes, se establece que “la regla de límite de crecimiento del gasto estará regida en todos los casos por el incremento del PIB (producto interno bruto)”.
Para el ex ministro del Interior y actual diputado Rogelio Frigerio esto implica “una flexibilización del gasto”.
“Antes el límite lo fijaba el Indice de Precios al Consumidor (IPC). Ahora al tomar el PBI nominal -que tiene incluido el efecto inflacionario- da margen para gastar más, siempre y cuando la economía crezca”, explica Frigerio.
Según la previsión del Gobierno, el año próximo el producto bruto se expandirá 4% en términos reales, aunque el consenso de los analistas económicos es que el crecimiento será del 2,5%, lejos del 10% con el que cerrará este año.
Además, el nuevo consenso establece que “en atención al impacto de la pandemia del virus Covid-19 en las finanzas públicas durante 2020 y 2021, que determinaron las modificaciones introducidas por la Ley 27.591, para el año 2022 se considerará un proceso de transición y adecuación en materia de cumplimiento de las pautas de gasto y de empleo público”.
“Con esto va a haber un margen mayor para aumentar el gasto público. En 2017 se planteaba reducir gradualmente el gasto que se había casi duplicado en la última década. Ahora con esto lamentablemente se flexibiliza y termina en un aumento de los impuestos, cuando la gente lo que espera de la política es alivio fiscal”, dice Frigerio.
“Las provincias están siendo afectadas por un modelo en el que la emisión pasa reemplazar la recaudación impositiva. La emisión no se coparticipa y este modelo termina discriminando a las provincias“, detalla.
El ex ministro también arremete contra la forma que el actual gobierno eligió para llevar adelante este acuerdo. “Cuando nos tocó a nosotros yo estuve meses negociando con los gobernadores y ahora buscan hacerlo de una semana para la otra. Tendrían que revisar esto porque no es lo que la gente está esperando“.
Además, el acuerdo busca que las provincias y CABA se abstengan por un año de “iniciar procesos judiciales, y suspender por igual término los ya iniciados, relativos al Régimen de Coparticipación Federal de Impuestos”.
Esto perjudica a CABA que demanda a la Nación por los recortes en el coeficiente de coparticipación de 3,5% a 1,4%. No obstante, la Ciudad de Buenos Aires ya anticipó su rechazo a este consenso.
AQ