25.5 C
Santiago del Estero
HomeEspectáculosHabla la directora de "Tosca" en el Colón, Keri Lynn-Wilson, que por...

Habla la directora de “Tosca” en el Colón, Keri Lynn-Wilson, que por la guerra no dirigió a la rusa Anna Netrebko

De ascendencia ucraniana, lo que lo llevó a formar una orquesta para difundir la cultura de ese país a raíz de la invasión rusa, y criada en Winnipeg, la directora canadiense Keri-Lynn Wilson es la líder principal de las funciones de Tosca que presenta actualmente el Teatro Colón.

Un detalle no pasa desapercibido: Wilson dirige todas las funciones con excepción de tres, justamente las que encabeza Anna Netrebko, la destacada soprano rusa.

El hecho se relaciona directamente con la postura activa de la directora en favor de Ucrania, e indirectamente con la tensión nunca relajada entre Netrebko y el Metropolitan Opera House, dirigido por el esposo de Wilson (Peter Gelb). El Met es una de las instituciones en las que la soprano reinaba y una de las que más fuertemente la han castigado este año por su supuesta adhesión al gobierno de Putin.

Keri-Lynn Wilson directora de la obra Tosca en el Teatro Colón. Foto: Andres D’Elia

Mientras tanto, a Keri-Lynn Wilson, que pese a estas circunstancias es una artista concentrada en ser valorada por su talento musical más allá de todo género o postura política, le toca quedar en medio de ese fuego cruzado. Gracias a su cordialidad y diplomacia, acepta un diálogo abierto sin censura previa, aunque claramente evita ahondar en determinados temas extra-musicales.

Pasada la primera función que tuvo a su cargo (el elenco que lidera Netrebko actúa bajo la batuta de Michelangelo Mazza), Wilson se muestra más que satisfecha con el resultado: “Tenía una gran expectativa y no me desilusioné. Sentí un entusiasmo enorme durante los aplausos. La orquesta es maravillosa y la acústica también. Claro que el foso es el peor lugar para percibir esa acústica, pero se siente la calidez del ambiente, y es algo hermoso”.

“Amo a Puccini”

Keri-Lynn Wilson directora de la obra Tosca en el Teatro Colón. Foto: Andres D’Elia

-Ésta es una puesta muy clásica. ¿Qué piensa de las producciones modernas en las que la historia o los personajes son alterados?

-La puesta debe potenciar la música y contar la historia. Y hay una sola historia; puede ser mostrada de diferentes ángulos y con diferentes estéticas. Si el director de escena pone demasiado de su propia interpretación y la historia resulta distorsionada, ininteligible o distante de los deseos del compositor, es inaceptable.

Pero si el régisseur sigue los deseos del compositor puede mostrar un nuevo punto de vista, y eso es lo que mantiene vivo al género, y hace que las obras de repertorio se mantengan vigentes y le sigan interesando al público.

-¿Cuál es su conexión con la música de Puccini?

-Amo a Puccini, y Tosca fue la segunda ópera que dirigí. Para mí Puccini representa al compositor de ópera por excelencia. Su música respira vida y emoción. En cada función se me pone la piel de gallina, y es imposible no sentir las emociones que siente el público. Pasé muchos años trabajando en Torre del Lago, donde vivió tantos años, me hice amiga de su nieta Simonetta Puccini, y fue maravilloso haber estado inmersa en esa cultura y en su mundo. Puccini me ayudó a enamorarme de la ópera.

-¿Qué le resulta más estimulante de dirigir ópera, y específicamente ópera italiana?

-Amo la ópera, pero de chica la odiaba. Crecí en una familia muy musical, mi hermana cantaba y amaba la ópera, pero yo no podía soportarla, era una snob del repertorio sinfónico y el ballet. Me encantaba Bruckner y estaba muy orientada hacia el repertorio orquestal.

Después fui a Juilliard a estudiar flauta, pero después de cuatro años me sentí muy limitada y perdí el interés por el instrumento. Pero mientras tocaba la flauta en la orquesta leía y estudiaba las partituras orquestales, asistí a clases de dirección y me di cuenta de que éso era lo que quería hacer. Pasé la prueba para estudiar dirección en Juilliard, y pasé otros cuatro años estudiando y… ¡voilà! Nunca volví a tocar la flauta.

Recién cuando me recibí como directora, y empecé como directora asociada en la Orquesta Sinfónica de Dallas, trabajé un verano para una compañía de ópera francesa en New York. Y un día, un empresario, Mario Dradi, el manager de Los Tres Tenores, estaba organizando un concierto en el Vaticano con José Carreras, Daniella Desi y otros, y me pidió que dirigiera.

Acepté, fue un éxito, y me ofreció dirigir una Lucia di Lammermoor en el teatro de Verona. Tuve que aprender en seis meses todas las tradiciones del bel canto, y me terminé de enamorar de la ópera. Mi vida dio otro giro y empecé a dirigir en varios teatros, sobre todo ópera italiana.

De prejuicios y cancelaciones

La directora canadiense Keri-Lynn Wilson, líder principal de las funciones de Tosca que presenta actualmente el Teatro Colón. Foto gentileza Máximo Colombaroli

-Usted afirmó no estar interesada en ver su oficio desde una perspectiva de género. A pesar de eso, ¿sintió en algún momento que ser mujer era una desventaja, o se sintió discriminada?

(Resopla) -No pienso en eso porque es un desperdicio de energía. Si me critican, espero que sea por mi desempeño profesional, por mi calidad de directora y no de mujer directora. Me ha pasado que alguien de la gerencia de una orquesta me dijera: “Bueno, pero ya tenemos a una directora mujer esta temporada”. Hay declaraciones que no tienen sentido: las mujeres tenemos cerebros, almas, corazones, manos y fuerza física.

-Si bien ya no es raro que haya directoras invitadas en las orquestas del más alto nivel, hasta ahora no ha habido directoras titulares en ellas. ¿Cuánto piensa que falta para eso?

-¿Quién sabe? La tradición lleva tiempo. La Filarmónica de Berlín, por ejemplo, hace unas décadas no tenía una sola mujer en sus filas y ahora está lleno, así que será un crescendo.

-¿Qué opina de las cancelaciones que tuvieron artistas como Plácido Domingo, más fuertes en Estados Unidos que en Europa?

-Mi opinión es directa: él es un gran artista y lo respeto como tal, pero menos como ser humano.

-Conocemos sus diferencias con Anna Netrebko y los inconvenientes respecto de su postura sobre el gobierno ruso. Pero seguramente se habrán cruzado en los pasillos del Colón. ¿Cómo está su relación con ella?

-No compartimos funciones, así que no me he cruzado con ella, pero si eso sucediera la saludaría cordialmente. De nuevo: es una cuestión de humanidad. La respeto como artista.

INFO: Tosca se presenta en el Teatro Colón los días sábado 26, domingo 27, martes 29, miércoles 30, jueves 1, sábado 3, domingo 4 y martes 6 de diciembre.

MFB

Mas noticias
NOTICIAS RELACIONADAS