Horas de zozobra se vivieron en la noche de este sábado en River. El defensor paraguayo Robert Rojas sufrió un espasmo coronario a las tres horas de haber sido operado de la fractura en la tibia y el peroné derechos. El futbolista fue inmediatamente estabilizado y ya está estable y lúcido. Desde el club informan que le están haciendo estudios para ver por qué sucedió y cuál será su futuro.
El jugador de River debió pasar por el quirófano producto de una una violenta falta que recibió el miércoles pasado en el partido de Copa Libertadores frente a Alianza Lima, en Perú, que le provocó la fractura de la tibia y el peroné. Rojas está internado en la Trinidad de San Isidro.
“Por ahora los cardiólogos no encontraron un motivo definido. Pero puede ser por conjunción de causas. Lo importante es q el espasmo es pasajero”, le dijeron a Clarín desde el entorno del jugador.
Las primeras noticias de la tarde decían que el futbolista paraguayo había sido operado con éxito. Tal como estaba previsto, la intervención se llevó a cabo este sábado en horas de la la mañana y fue encabezada por el médico del club de Núñez, Pedro Hansing. El primer parte médico había indicado que el procedimiento se llevó a cabo con total normalidad, sin complicaciones.
Al parecer, la descompensación del futbolista llegó tres horas después. “Rojas terminó bien la cirugía. Salió ok. Pero, después de tres horas hizo un cuadro de dolor precordial. Se le hicieron estudios y está bien. Obviamente está controlado. Está con su hermano que lo acompaña en la habitación”, le dijeron desde el equipo médico, este diario.
Ahora, Rojas permanecerá internado todo el tiempo que los cardiólogos crean necesario y recién saldrá de alta cuando estén seguros de que no existe ningún tipo de riesgo.
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