33.5 C
Santiago del Estero
HomeSociedadDe la tierra a la copa: de dónde salen los mejores vinos...

De la tierra a la copa: de dónde salen los mejores vinos argentinos

El vino argentino, considerado por ley la bebida nacional, crece en exportaciones y obtiene buenas calificaciones de los principales críticos internacionales que impulsan las ventas en el mundo.

En 2021, Argentina volvió a superar la barrera de los 1.000 millones de dólares en exportaciones de vino fraccionado, a granel y mostos, algo que no se conseguía desde 2013.

Los especialistas dicen que es el resultado de dos décadas de estudio de los suelos, apuesta a nuevos terruños y desarrollo de la vitivinicultura de altura.

Robert Parker Jr., Tim Atkin, Jancis Robinson y James Suckling, los cuatro críticos más reconocidos, han elogiado los terroirs, donde nacen los grandes vinos argentinos.

Los expertos catadores viajan a las bodegas o tienen sus propios enviados y, según sus paladares, orientan y aconsejan al consumidor qué vino comprar.

Las piletas y ánforas son el resultado de años de experimentación en la búsqueda de la vasija ideal de la familia Zuccardi. Foto Cecilia Profetico

Conseguir un puntaje alto de cualquiera de ellos se traduce en éxito de ventas en el exterior. No es el único camino para ganar mercados. Hay bodegas que cuestionan la imparcialidad de estos promedios y prefieren incursionar en otras acciones propias de marketing y comercialización.

Pero lo cierto es que los altos puntajes contribuyeron a la expansión internacional de los vinos argentinos.

“Que se sepa que en Argentina hay varios vinos con 100 puntos – el puntaje de la excelencia- es muy bueno para la marca país, y nos ubica en el mismo nivel de vinos de la Borgoña francesa y el Napa Valley”, afirma Alejandro Vigil, el responsable enológico de los vinos Catena Zapata y El Enemigo.

Vinos de Zuccardi Valle de Uco, elegida dos veces la mejor bodega del mundo por un jurado de casi 600 referentes internacionales. Foto Cecilia Profetico

Vigil, junto a otros grandes hacedores de vinos, como Sebastián Zuccardi, Marcelo Pelleriti, David Bonomi y Edy del Pópolo, son cultores de la enología de terroir, la uva que mejor se adapta a un tipo de suelo y clima. Los cuatro consiguieron 100 puntos, el puntaje de la perfección, con sus vinos.

Otro destacado winemaker, Alejandro Sejanovich, explica cuando arrancó esta transformación: “Después de 2010, la Argentina empieza a elaborar vinos que expresan los lugares. Vinos que respeten la viña, con buen riego, sin forzar a la uva y que interpreten el clima y el suelo”.

PerSe Wines, en Gualtallary. A mayor altitud y menor temperatura, la vid necesita de suelos con más proporción de piedras o calcáreos. Foto Cecilia Profetico

¿De dónde salen los grandes vinos? ¿Cuáles son las zonas emergentes y con futuro?

Las respuestas están en el último relevamiento del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), con información de la cantidad y calidad de viñedos cultivados en la última década.

Las bodegas son un gran atractivo turístico para la Argentina, quinto productor y octavo exportador mundial de vinos. Foto Cecilia Profetico

El mapa actualizado de las plantaciones y sus variedades fue elaborado por el Departamento de Estudios Vitícolas, que dirige Alejandro Marinetti. Aparecen la preponderancia de las zonas consolidadas de Mendoza, como Luján de Cuyo, Maipú y el Valle de Uco, nuevas zonas en San Juan y la expansión de los alrededores de Cafayate y los valles Calchaquíes, en Salta.

El informe muestra cuáles son las micro regiones emergentes, con resultados sorpresivos por el nivel enológico alcanzado, en la Quebrada de Humahuaca, la Patagonia y la Costa Atlántica, entre otros nuevos sitios explorados.

Agrelo se encuentra al pie de la Cordillera de los Andes y es una de las zonas más famosas del municipio de Luján de Cuyo.

La superficie de viñedos alcanza a 5.600 hectáreas y las plantaciones están en los 1.000 metros sobre el nivel del mar.

Una vista de la bodega Las Perdices, en Agrelo, una de las zonas más famosas de Luján de Cuyo. Foto Delfo Rodríguez / Archivo Clarín

Sus localidades vecinas, con similares características, aportan también grandes vinos a la zona: Perdriel con 1.400 hectáreas, Las Compuertas, 490 hectáreas y Vistalba, 400 hectáreas.

En las tierras cercanas a los cordones montañosos existe una gran amplitud térmica entre el día y la noche. La variación de temperatura permite que las uvas tengan una excelente concentración de taninos, responsables de darle estructura al vino.

Un trabajador en la bodega Chandon, también ubicada en la localidad de Agrelo. Foto: Claudio Gutiérrez / Los Andes

Las variedades tintas mejor adaptadas son Malbec y Cabernet Sauvignon, y algunos productores están probando la calidad que consiguen con Petit Verdot y Bonarda.

La precipitación media es de 200 mm y los vientos escasos permiten llegar a la cosecha con una mínima incidencia de enfermedades que atacan a estos cultivos.

Pertenece al municipio de Maipú y tiene 2.700 hectáreas de vid. Su clima ligeramente más cálido genera vinos más suaves y maduros que los de otras partes de Mendoza. Gran desarrollo de las variedades Cabernet Sauvignon, Syrah, Malbec y Bonarda.

La precipitación media de 197 mm y los vientos escasos también permiten llegar a la cosecha con una mínima incidencia de enfermedades que afectan a la vid.

Barricas en Pascual Toso, una bodega de Barrancas. Foto Archivo Clarín

Tiene una temperatura media anual de 15 ºC. La temperatura máxima promedio del mes más cálido es de 23 ºC y la mínima promedio del mes más frío ronda los 7 ºC. Estas condiciones climáticas permiten una buena maduración de variedades de ciclo corto y largo.

Ubicada en el municipio de San Carlos, en el Valle de Uco. La superficie implantada es de 2.800 hectáreas de viñedos.

La altura del paraje varía entre 1.000 a 1.200 metros sobre el nivel del mar y se asocia a un clima continental con fríos muy intensos y marcada amplitud térmica.

El restaurante Piedra Infinita de la bodega Zuccardi en Paraje Altamira, frente a la majestuosa Cordillera de Los Andes. Foto Cecilia Profetico

Las temperaturas descienden hasta 5º C promedio en noches estivales. Estas características han permitido el óptimo cultivo de cepajes de Merlot, Cabernet Sauvignon, Pinot Noir y Chardonnay.

La conjugación de microclimas, alturas y suelos da como resultado múltiples terroirs para expresar su identidad en el vino. Foto Cecilia Profetico

Las precipitaciones alcanzan los 300 milímetros anuales y por lo general las lluvias ocurren en verano, con tormentas que que pueden llegar a precipitar 60 milímetros en solo una hora.

Sus suelos han sido generados a partir de depósitos fluviales antiguos cubiertos por depósitos aluviales.

Distrito del municipio de Tunuyán, en el Valle de Uco, de Mendoza. Con una superficie plantada con vid de 1.000 hectáreas, las variedades más difundidas son Malbec, Cabernet Franc, Petit Verdot, Chardonnay y Sauvignon Blanc.

La bodega Piedra Negra, en Los Chacayes. Foto Archivo Clarín

Es una región de suelos profundos, aluviales de gravas volcánicas y graníticas, sumados a la altitud, la aridez y las temperaturas nocturnas frescas, que contrastan por completo con las cálidas temperaturas diurnas.

Gracias a esta diversidad de características, combinada con una gestión rigurosa de los viñedos y los rendimientos, se pueden producir grandes vinos frescos, concentrados y de gran color, buena acidez y excelente tenor alcohólico.

Ubicado en el municipio de Tupungato, en el Valle de Uco. La zona es reconocida por su impactante belleza y por su altitud, 1.500 metros sobre el nivel del mar.

Monasterio en Gualtallary, donde están las uvas que dan origen a los vinos PerSe Iubileus, La Craie y Uni del Bonnesant. Foto Cecilia Profetico

Con 330 días de sol al año, marcada amplitud térmica e insolación lenta, reúne condiciones excepcionales.

Los suelos son aluvionales, arenosos, con base de piedra con sedimentos de carbonato de calcio. En sus 2.500 hectáreas, los cepajes que se destacan son Malbec, Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Pinot Negro, Chardonnay, Syrah, Merlot.

Las uvas para la elaboración del Catena Zapata Viñedo Adrianna Malbec 2011, en Gualtallary. Foto Cecilia Profetico

En San Juan se destacan las zonas de Pedernal y Barreal

El primero pertenece al municipio de Sarmiento. Existen 760 hectáreas plantadas, predominan las plantaciones de Cabernet Sauvignon y Chardonnay.

En general, los suelos del valle del Pedernal son aluvionales y de erosión eólica, con elevado porcentaje de roca caliza mezclado con tierra franco limosa muy homogéneos en todo el perfil y con excelente permeabilidad.

Una vista de Barreal, en San Juan. Foto Archivo Clarín

El clima es semiárido con régimen de lluvias promedio de 150 mm durante la época estival. Muy frío en invierno con heladas diarias en junio y julio; y en verano, con una diferencia entre el día y la noche de 20 ºC.

Barreal está ubicado en el centro este de Calingasta, en el margen derecho de río Los Patos, donde predomina el paisaje cordillerano, a 1.600 metros sobre el nivel del mar.

Los suelos son originados en materiales transportados provenientes de la erosión cordillerana causada por vientos, gravedad, agua aluvional y procesos de glaciares.

Su microclima está influenciado por la altitud, la pendiente, los vientos y la flora natural.

Dentro de las 22 hectáreas de viñedos en producción, se destacan las variedades Malbec, Syrah y Pinot Grigio.

Está en el noroeste de Argentina, al sur de la provincia de Salta y dentro de la región de los Valles Calchaquíes.

El clima es templado, con notable amplitud térmica y gran exposición solar. Los veranos son largos. Son frecuentes las granizadas localizadas, durante las tormentas de verano.

El camino de ingreso a bodega San Pedro de Yacochuya, en Cafayate. Foto Archivo Clarín

Tiene 2.489 hectáreas implantadas. El perfil del suelo, a 1.600 msnm, es profundo, algo pedregoso, lo que asegura una excelente permeabilidad.

La bodega Piatelli, en Cafayate Foto Archivo Clarín

El Valle de Cafayate es una de las mejores zonas de cultivo de uvas blancas. La variedad emblema es el Torrontés, tipo de uva que según estudios genéticos es una cruza de las variedades Moscatel de Alejandría y Criolla Chica de Argentina, con sus típicos aromas a azahares, rosas y miel. También hay vinos de Malbec, Cabernet Sauvignon y Tannat.

Añelo, el municipio más extenso de Neuquén, en el sector centro-este de la provincia, concentra 1.592 hectáreas, el 90% de la superficie cultivada de vid neuquina. Están localizadas principalmente en San Patricio del Chañar, a la orilla del río Neuquén.

Posee un clima semiárido de meseta debido a sus condiciones de déficit hídrico y la significativa amplitud térmica diaria y anual.

La temperatura media anual es de 14°. El promedio en enero es superior a 21°, y en julio, menor a 8°. Se suelen registrar más de 30 heladas al año.

Viñedos en San Patricio del Chañar, Neuquén. Foto Archivo Clarín

Las precipitaciones son escasas, no superando los 220 mm al año. Los vientos son moderados a fuertes, lo que constituye un factor adicional de aridez.

Las variedades con mayor superficie implantada son tintas: Malbec, Cabernet Sauvignon, Merlot y Pinot Noir.

En el Alto Valle de Río Negro, en tanto, hay 1.600 hectáreas cultivadas. Los viñedos alcanzan los 370 metros en los altos valles al oeste del territorio y su altura disminuye con el curso de los ríos hacia el Atlántico, hasta alcanzar los 4 metros.

En el oeste, el clima es mayormente continental y seco, con escasas precipitaciones y baja humedad. Los inviernos son fríos y los veranos, cálidos y secos, lo que otorga a la región una gran amplitud térmica. Los vientos que soplan de la cordillera austral aumentan la sequedad del ambiente y permiten una excelente sanidad de los viñedos.

Los vinos tienen una buena relación entre alcohol y acidez, producto de una maduración lenta de las uvas. Entre las variedades blancas, se destacan Sauvignon Blanc y Semillón. En los tintos, hay Malbec, Merlot y Pinot Noir.

Es la segunda ciudad en importancia de la provincia de La Rioja. Está en el Valle Antinaco-Los Colorados, encerrada por los cordones de la sierra de Velasco, al este, y la sierra de Famatina, al oeste.

Su clima es seco, con días cálidos y noches frescas. Gracias a esa amplitud térmica los vinos que se elaboran son frutados e intensos. Los tintos presentan un gran color y los taninos son realmente dulces.

Viñedos del cordón de Famatina. Foto Archivo Clarín

La temperatura media ronda los 18 grados. Los inviernos son muy cortos y los veranos, secos e intensos.

Sus suelos son de origen aluvional, profundos, bastante permeables, de buena fertilidad, franco arenosos o limosos y raramente salitrosos.

Tiene 8.083 hectáreas de viñedos. Entre las variedades de uvas, la estrella es sin dudas la blanca Torrontés Riojano, que con sus característicos aromas genera vinos muy expresivos y perfumados.

También hay cepas de Cabernet Sauvignon, Bonarda, Tannat, Barbera, Syrah, Malbec y Moscatel.

Viñedos de altura en la Quebrada de Humahuaca. Foto Archivo Clarín

Quebrada de Humahuaca

Es un extenso, estrecho y árido valle montañoso. La zona apta para plantaciones tiene una extensión sobre la ruta nacional 9 de aproximadamente 80 kilómetros de largo.

Su centro poblacional es Tilcara y está limitado en su extremo sur por la localidad de Tumbaya y en su extremo norte, por la de Humahuaca.

Viñedos en Maimara, en Jujuy, en la bodega Fernando Dupont. Foto Archivo Clarín

La Quebrada de Humahuaca tiene un clima influenciado por la altitud y la aridez de la montaña. Hay una acentuada amplitud térmica, tanto estacional como diaria. 

Las precipitaciones ocurren por lo general en el verano, ya que los inviernos son muy secos.

La superficie implantada de viñedos es de 52 hectáreas. Y las principales variedades son tintas: Malbec, Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc y Tannat.

Tinogasta

Es un municipio al oeste de la provincia de Catamarca y limita con la Cordillera de los Andes. La altura media sobre el nivel del mar es de 1.500 metros.

Uvas en Tinogasta, un terroir emergente. Foto Archivo Clarín

El tipo de clima es árido, de sierras y bolsones, semi desértico y ventoso seco. La presencia de una barrera orográfica por la cordillera andina impide el paso de los vientos húmedos del Pacífico, que llegan secos y cálidos.

La superficie de viñedos es de 1.800 hectáreas. Las variedades de mayor importancia son Bonarda, Cabernet Sauvignon, Syrah, Chardonnay y Torrontés Riojano.

Chapadmalal

Es una localidad del partido de General Pueyrredón, sobre la Costa Atlántica, a 23 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata.

Sus suelos pertenecen al sistema de Tandilia que conforman ondulaciones interserranas con afloramientos rocosos, con pendientes que se van atenuando a medida que se alejan de la sierras.

Bodega junto al mar. Trapiche Costa y Pampa, en Chapadmalal. Foto Archivo Clarín

Las tierras aptas para la agricultura ocupan un 65%, con suelos profundos ricos en materia orgánica y de elevada fertilidad, con contexturas franco-arcillo-arenosa en su primer horizonte, y buena capacidad de retención de agua y drenaje.

Uno de los factores que definen el clima de la zona y sus implicancias en la producción de vid lo provoca la cercanía del mar, que produce un efecto estabilizante que reduce la amplitud térmica y la intensidad de las heladas, y que disminuye a medida que se aleja de la costa.

El promedio anual de humedad relativa ambiente alcanza 80%. La velocidad media del viento oscila entre 10 y 15 Km/hora y la precipitación oscila entre 60 y 85 mm mensuales.

Los veranos son relativamente frescos y los inviernos no tan rigurosos, lo que determina una baja amplitud térmica anual. Los viñedos están situados a menos de 7 kilómetros del Mar Atlántico Sur y a 25 msnm.

Hay 26 hectáreas de viñedos implantadas. Las variedades son: Chardonnay, Sauvignon Blanc y Pinot Noir.

Saldungaray

A 227 metros de altura sobre el nivel del mar, en el municipio de Tornquist, en la provincia de Buenos Aires.

Maridaje. Con uno de los vinos que produce la bodega Saldungaray, en esa localidad bonaerense. Foto Bodega Saldungaray

La precipitación media es de 700 mm, con valores extremos de 550 a 750 mm. La temperatura media anual de 13,4 ºC; la temperatura promedio del mes más cálido, 21,7 ºC y la del mes más frío, 6,3 ºC. Estas condiciones climáticas, permiten una buena maduración de variedades de ciclo corto y largo.

Tiene 9 hectáreas de viñedos implantadas con Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon y Sauvignon Blanc.

Trevelin

Ubicada en el departamento Futaleufú, a orillas del río Futaleufú, dentro de la macro región Patagonia argentina.

Su clima es templado y húmedo. La temperatura media anual es de 10 a 5 °C, con copiosas nevadas durante el invierno.

Bodega patagónica. Casa Yagüe, en la localidad de Trevelin. Foto Archivo Clarín

La población más cercana es el pequeño pueblo galés de Trevelin, a sólo 22 kilómetros de Esquel. En sus cercanías se encuentra el linde sudeste del parque nacional Los Alerces.

Cuenta con algunos de los viñedos más australes del mundo, cuya existencia representa un verdadero desafío a las latitudes meridionales en donde se encuentran.

En las 11 hectáreas implantadas predominan el Chardonnay y el Pinot Noir.

AS

TEMAS QUE APARECEN EN ESTA NOTA

Mas noticias
NOTICIAS RELACIONADAS