15.6 C
Santiago del Estero
HomeEconomíaLluvia de inversiones: en solo un año se crearon 9 unicornios argentinos

Lluvia de inversiones: en solo un año se crearon 9 unicornios argentinos

El martes pasado, la compañía SoFi Technologies anunció la compra de Technisys por US$1.100 millones, lo que la convierte en el 13° unicornio argentino. Su CEO y fundador, Miguel “Mike” Santos, ironiza sobre una noticia que fue reproducida incluso por el influyente The Wall Street Jornal: “Sucedió justo el 22/02/2022 y la compañía se llama SoFi, como mi hija Sofía”, se ríe el empresario.

Creada a mediados de los 90, Technisys es proveedora de tecnologías para bancos y fintech. Una adelantada a su tiempo, ya que hoy es uno de los rubros que más creció durante la pandemia. Un período excepcional por el volumen de inversiones en startups en la región y también en la Argentina. Tanto es así que en el último año 9 compañías de origen argentino superaron la valuación de US$1.000 millones, y por le dicen unicornios.

Hasta ahora, solo 4 habían logrado hacerlo: Mercado Libre, Globant, Despegar y OLX. Desde marzo de 2021 surgieron Auth0, Aleph, Vercel, Mural, Bitfarms, Ualá, Tiendanube y Satellogic. Santos cuenta a Clarín que la fusión con SoFi les permitirá complementar tecnologías, productos y mercados, “pero funcionaremos en forma independiente”.

Egresado de la carrera de Ciencias de la Computación, Santos tiene 51 años. Creó Technisys junto a Adrián Iglesias y Germán Pugliese Bassi, vive en Miami y sueña a lo grande: “La compañía crece al 30% anual de manera sostenida en los últimos años. Opera en 15 países y tiene 1.200 empleados”, relata entusiasmado. Santos recibió numerosas felicitaciones en su cuenta de Twitter, entre ellas la de Marcos Galperin (Mercado Libre), Emiliano Kargieman (Satellogic), y Martín Varsavsky.

Como se dijo, las startups tecnológicas aprovecharon la abundancia de capitales. Según un relevamiento de la consultora CB Insights, en el primer semestre de 2021 surgieron 249 nuevos unicornios en el mundo. “En 2021, se invirtieron US$15.000 millones en emprendimientos tecnológicos de la región, son volúmenes récord”, sintetiza Diego González Bravo, vicepresidente de la ARCAP, la entidad que agrupa a más de 40 fondos de inversión.

El club de los unicornios se agrandó a partir de marzo del año pasado. Ese mes, la californiana Okta desembolsó US$6.500 millones para comprar Auth0, la startup que fundaron Matías Woloski y Eugenio Pace y que desarrolla tecnologías de autenticación. El volumen de la operación causó asombro, pero los analistas creen que se dio en un momento muy particular. “La pandemia aceleró la digitalización y las tecnológicas adelantaron su futuro y se volvieron más valiosas”, dice Ignacio Plaza, cofundador del fondo Draper Cygnus.

Las circunstancias favorecieron el desarrollo de muchas compañías, que lograron capitalizar la abundancia de liquidez global y la escasez de opciones rentables por las tasas reales negativas. Los analistas creen que todo eso impactó en las cotizaciones del Nasdaq, que desde el inicio de la pandemia no pararon de trepar. Ahora caen, pero con un piso más alto. El caso de Mercado Libre es ilustrativo. En 2020, la valuación del gigante del eCommerce despegó desde los US$30.000 millones y llegó a superar la barrera de los US$100.000 millones. Este viernes, su valor bursátil rondaba los US$55.500 millones.

Gustavo Neffa, de Research for Traders, le resta dramatismo pero aclara que ya no habrá abundancia de capitales. “Se acabó la era del dinero infinito y regalado. Se viene un ciclo alcista de tasas (la Fed ya avisó) y se empieza a cerrar el grifo”. No obstante, el analista financiero remarca que “los unicornios no van a desaparecer como los dinosaurios”, señala.

En este sentido, Neffa distingue la realidad de los mercados con la evolución y el potencial de los emprendimientos tecnológicos. “Hay temor y menos predisposición para financiar startups, pero no creo que frenen totalmente”, dijo. Otros expertos coinciden con esa mirada y añaden otro aspecto que ilusiona. Creen que los inversores de riesgo (los venture capitalists) descubrieron que en la región hay muchas startups con la capacidad de liderar o disputar los mercados globales. “Buenos Aires tiene el ecosistema cripto más importante del mundo”, señala González Bravo.

Las condiciones favorables del mercado no les resta méritos a las compañías. Con pocos días de diferencia, Ualá y Tiendanube se convirtieron en unicornios. En setiembre, la fintech logró recaudar US$350 millones de inversores privados, que la valuaron en US$2.450 millones. Tiendanube, especializada en el comercio electrónico, cerró una ronda récord de US$500 millones y alcanzó una valuación de US$3.100 millones.

Santiago Sosa, de Tiendanube, se ríe cuando le pregunta si la empresa es argentina o brasileña: “Somos un unicornio latinoamericano”.

Santiago Sosa, cofundador de Tiendanube, sostiene que la última inyección de capitales les permitió acelerar los planes de negocios. “Desde que somos unicornio compramos 3 compañías en Brasil: una de logística, otra de educación para pymes y la tercera que todavía no la anunciamos”, adelantó el empresario, un ingeniero egresado del ITBA. Con más de 1.000 empleados y unos 90.000 usuarios y clientes (Billabong, Rasti, Lucerna y Kitchen Aid, entre otros), Tiendanube es una plataforma que les permite a las marcas instalar sus propias tiendas online.

De todas, la más vanguardista es Satellogic, una compañía aeroespacial fundada por Emiliano Kargieman y Gerardo Richarte en 2010. El año pasado alcanzó primero una valuación de US$850 millones y a partir de enero comenzó a cotizar en el Nasdaq a través de un instrumento financiero conocido como SPAC. Se trata del proceso inverso al habitual, ya que el SPAC consigue fondos en la bolsa para comprar startups.

Precisamente, dos cofundadores de Mercado Libre, Marcos Galperin y Hernán Kazah trabaron una nueva alianza para crear una SPAC, es decir una nueva empresa (MELI Kaszek Pioneer Corp), que saldrá a cotizar en el Nasdaq con el fin de captar US$250 millones.

En un comunicado conjunto, anunciaron que esta nueva empresa saldrá a cotizar bajo el símbolo “MEKA” y que “está estructurada como una compañía de cheque en blanco cuyo propósito es recaudar capital para luego buscar una empresa de base tecnológica en el ecosistema digital de América Latina”.

Los unicornios proliferaron en toda la región. “Por cantidad, Brasil concentra el 60% del total. Después aparecen México y la Argentina”, resume González Bravo.

¿Sos unicornio o te hacés?

Mercado Libre, Globant, Despegar y OLX marcaron el camino.Hasta 2021, fueron las únicas 4 tecnológicas argentinas que lograron superar una valuación de US$1.000 millones y por eso se las considera unicornios. En los últimos 12 meses, otras 9 startups argentinas lograron ingresar al exclusivo club de empresas más valiosas. Son todos proyectos originados por argentinos o que surgieron en el país, pero que en algunos casos generan controversias.

El motivo es que hay casos, como Vercel o Bitfarms, que fueron fundadas por argentinos en EE.UU. y Canadá y se proclaman como unicornios argentinos. Otro caso curioso es Tiendanube, la plataforma de eCommerce creada por estudiantes universitarios del ITBA y la UBA en 2011 y que acaba de ser valuada en US$3.100 millones de dólares. Argentinos y brasileños se la computan como propia, algo que a Santiago Sosa, uno de sus cofundadores, le causa gracia. “Somos una empresa latinoamericana”, dice con diplomacia.

No obstante, el empresario aclaró que “nuestra compañía nace en la Argentina y es uno de nuestros principales mercados de operación. Muy poquito tiempo después, llegamos a Brasil”. Hay quienes la nacionalidad de una startup les importa poco, pero para otros no es un concepto neutro. Para el inversor Lisandro Bril, “el país de origen de un unicornio es donde está el centro de decisiones y donde se genera el empleo”.

Gastón Taratuta, CEO y fundador de Aleph Holding, dice que su empresa crecía antes de la pandemia.

Enfocada en el negocio de la publicidad en redes sociales, Aleph engrosa la lista de unicornios argentinos, al ser valuada en US$2.000 millones. Se trata de un holding creado por Gastón Taratuta con apenas US$5.000, cuyo modelo de negocios es captar publicidad y anunciantes en mercados emergentes para gigantes como Facebook, Twitter, LinkedIn, Snapchat, Twitch, TikTok y Spotify.

Taratuta dice que la valuación actual de la compañía no tiene que ver con la pandemia. “Estamos en una industria que ya venia creciendo desde antes”, explicó a Clarín el empresario. Aleph tiene 1.200 empleados y cinco bases de operaciones: Estados Unidos, la Argentina, Dubai y España. ¿La considera argentina, entonces? “Es un unicornio con mirada global”, responde Taratuta.

Lo usual es que las startups busquen financiamiento privado. Este es el primer paso, pero casi todas aspiran a saltar a la Bolsa de Nueva York. En este sentido y luego de superar la valuación mágica de los US$1.000 millones, Taratuta adelanta que su próximo paso es lanzar el IPO en el Nasdaq. “Estamos trabajando en eso”, dijo, sin dar más precisiones.

Hay otras controversias con respecto a los unicornios. Están aquellas que superan la barrera y posteriormente caen. Tal es el caso de Despegar, golpeada por la pandemia y que de a poco se recupera. Hoy su valuación ronda los US$830 millones. Otro caso es Satellogic.

La compañía salió a la Bolsa en enero y en su debut la acción superó los US$9, lo que la convirtió en unicornio. Posteriormente, su valor cayó y llegó a rondar los US$5. Uno de los cofundadores, Emiliano Kargieman, suele decir que la calificación de unicornio no tiene ninguna importancia. Pero cuando la cotización de la compañía cayó anunció un plan de recompra de acciones “porque el valor en Bolsa no refleja el valor real”, dijo.

Las discusiones sobre la naturaleza de los unicornios no se agotan allí. La valuación de las startups dependen de las inversiones que reciben. Pero esta regla no aplica a Etermax, la creadora del célebre juego Preguntados, que nació rentable y nunca recaudó fondos. A pesar de esto, en el mercado la consideran unicornio. ¿Un fantasma?

“Desde que se creó en 2009, tenemos el orgullo de nunca haber recibido capitales de terceros”, dice su CEO y fundador, Máximo Cavazzani. Dice también que le “llena de orgullo lo que está pasando en la región en estos últimos 2 años. El nivel de inversión en tecnología dentro de América Latina es algo que venía atrasado y nos encanta ver que finalmente los fondos internacionales ponen el ojo en el talento en la región”.

Pomelo es otro ejemplo curioso. Creada hace un año para ofrecer infraestructura de medios de pagos, la compañía recibió US$45 millones de inversores privados antes de comenzar a operar. “Estos fueron años de mucha liquidez internacional y las startups lo aprovecharon”, asegura su CEO, Gastón Irigoyen.

La startup fue creada por ex ejecutivos de Naranja X, Mercado Pago y Mastercard y atrajo el interés de varios fondos de inversión, entre ellos los fundadores de Twitter, PayPal, Rappi, Kavak y Auth0. Se dedica a proveer tecnología de medios de pagos para empresas, tarjetas y fintech desde Buenos Aires para toda la región. 

Mirá también

Mirá también

TEMAS QUE APARECEN EN ESTA NOTA

Mas noticias
NOTICIAS RELACIONADAS